La iglesia de Santiago requiere -siempre según el consistorio- reparaciones por valor de 2'6 millones de euros, de los que se han invertido ya 600.000 €. Las obras las están sufragando la Conferencia Episcopal, la diócesis de Cartagena y el resto de diócesis de España.
Entre otras actuaciones, habrá que reforzar bóvedas y pilares, reconstruir muros, arcos, el tambor y la cúpula. Ya sabemos que la iglesia está destruida prácticamente por completo.
Hace unos meses se instaló una cubierta protectora de metal encima del templo, para proteger los restos de los efectos de la lluvia o la exposición a la intemperie.
Cuando se produjo el primer terremoto, la iglesia estaba llena de niños que estaban estudiando la Catequesis. Al sacerdote aquellos temblores no le gustaron nada, de manera que les dijo que regresaran a sus casas. Dos horas más tarde, el techo se desplomó por completo. Pienso que a D. Eduardo Sánchez Carrasco, párroco de Santiago, debe ser considerado por este gesto uno de los Héroes que salvaron a la ciudad de una desgracia que podría haber sido aún mucho mayor.
El suelo de la sacristía de Santiago
se vino abajo de pronto unos meses después
Iglesia de Santiago en verano de 2012.
La calidad de la foto no es buena,
pero se aprecia toda la extensión de la cubierta
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