La Oficina Periférica de
Comunicación (OPC) de la Guardia Civil de Murcia, informa de que han encontrado
en Alhama una instalación en la que se manipulaba carne para consumo humano sin
las menores garantías sanitarias. El chiringuito -hay que llamarlo así-
consistía básicamente en un camión frigorífico aparcado dentro de una nave y
conectado a la electricidad, donde gente sin formación cortaba y manipulaba la
carne sin miramientos. Ni siquiera había agua corriente; sólo dos personas sin
ningún tipo de carnet profesional, que después de trocear la carne dentro del
camión la metían en furgonetas y la vendían en algunos bares y otros locales.
Según la OPC, el Servicio de
Seguridad Alimentaria de la Región de Murcia le pidió ayuda a la Guardia Civil
para ver qué estaba pasando en el interior de una nave industrial ubicada en
Alhama; sabían que había gente trabajando, y sospechaban que estaban
manipulando alimentos, pero desconocían en qué condiciones y con qué permisos.
Los guardias y los inspectores
entraron en el local y vieron el camión frigorífico aparcado ahí en medio,
conectado a la electricidad, y dentro las dos personas. Ni siquiera tenían un
lavamanos. Lo que sí había era todo tipo de utensilios para despiece y envasado
de carnes: una cortadora industrial, picadoras, cuchillos, una máquina de
envasado al vacío...
También había cerca de 750 kilos de
carne de todo tipo: ave, cerdo, cordero, ternera, conejo y pavo. La OPC matiza:
en distintas formas de presentación,
que no me quiero ni imaginar.
Tras manipular la carne, la metían
en dos furgonetas -una frigorífica y otra isotermo- y la repartían en
diferentes comercios, sobre todo bares. Cuyo listado sería muy de agradecer,
para saber dónde no tenemos que tomarnos ni un cortado.
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